Previo a Mandelbrot, el fenómeno de la fractalidad en el universo parecía ser el estudio solo de un caos, un desorden entre planos y más planos hasta el infinito. Aun con los principios de la divina proporciona u otros cálculos anteriores que permitan entender la disposición de las formas de una forma compositiva y proporcional, el fenómeno del fractal como una cualidad mesurable o calculable en la naturaleza no había sido posible. Es entonces que Benoit Mandelbrot (a partir de los estudios sobre el infinito previos de Gastón Julia) logra hacer la formula para poder replicar con un dispositivo como la computadora capas de manejar los datos , cosa imposible para la mente humana, capaz de replicar la complejidad de la realización fracturada de la naturaleza y el universo en general.
La comprensión de que en la complejidad de las formas fractaes, coexiste la simplicidad en el fenómeno es un aspecto muy importante que reflexiona Mandelbrot. Toma como ejemplo La coliflor, que al ser cortada a la mitad, y extraerle un pedazo y cortarlo de nuevo a la mitad, se encontrara la misma repetición de formas en superficie.
La comprensión de que en la complejidad de las formas fractaes, coexiste la simplicidad en el fenómeno es un aspecto muy importante que reflexiona Mandelbrot. Toma como ejemplo La coliflor, que al ser cortada a la mitad, y extraerle un pedazo y cortarlo de nuevo a la mitad, se encontrara la misma repetición de formas en superficie.
La imposibilidad del humano de llegar a un punto tangible en el que identifique el inicio o final de este fenómeno por ser infinito, crea muchas preguntas, como por ejemplo, ¿la vida misma será infinita (como fenómeno energético)? ¿la reproducción de las especies será una facturación de cada individuo al juntarse con otro (como células)?, o el tiempo, al ser infinito, ¿será un fenómeno fractálico? parecerían preguntas distintas al tema, pero parten de un mismo principio metafórico, la multiplicidad de la misma forma y del tiempo-espacio, o de las cosas en distinto tamaño pero en el principio de semejanza.
Para el arte éste fenómeno es de suma importancia, ya que además de analizar las formas visuales y su reproducción como constante, llega a incidir también en el análisis de la teoría del color y la fractalidad de la luz, un tema que interesa al artista desde que analiza el fenómeno de la percepción de la amplia gama del color, hasta el de la conformación de nuevas ilusiones visuales.
